Dormitorios Chicos Slytherin

Dormitorios Chicos Slytherin

Joel: *En cuanto llegaron, Adrián le dejó la maleta delante de una de las camas y fue a ocuparse de su propio baúl. El joven mago cogió su maleta mientras decía:*
-Buen trabajo, Adrián. Veo que sigues reconociendo quién es la autoridad en esta sala común.

Comenzó a guardar tranquilamente su ropa en los cajones de la pequeña cómoda.
- Habrá sido un verano largo, pero no me ha hecho estúpido.
Los libros e instrumentos de escritura se quedarían en el baúl siempre que no los necesitase.

Joel: -Lejos de mi intención el pensar lo contrario.
*Comenzó a guardar las cosas en sus sitios respectivos, pero el estuche de peltre lo guardó cuidadosamente debajo de su capa del colegio, en un bolsillo interno preparado a tal efecto. Ni loco dejaría su preciada varita ahí sola. Se tumbó en la cama y se acomodó diciendo:*
-Creo que me voy a echar una cabezada. Despiértame si necesitas algo. Pero que sea con un buen motivo.

Que descansara... ya hablarían de necesidades en otro momento. No era cosa ya de un día más o un día menos. Ahora que se había acostado, Adrian pudo guardar y ordenar sus pertenencias sin ser molestado. Cuando todo tuvo su lugar, también se echó a dormir.

Al escuchar la molesta explosión que venía del exterior, Adrian sacó su varita de debajo de la almohada y musitó:
- Imperturbable.
No iba a dejar que les molestase nadie a ninguno de los dos ya durante la primera noche.

Joel: *Tras una excelente noche de sueño reparador, el joven mago se levantó bostezando aparatosamente. Después se metió en el baño para ducharse y vestirse. Estaba hambriento y no veía la hora de ir a desayunar al comedor.*

Cuando Adrian se despertó, estaba solo en la habitación. Su hechizo había salido bien. Recogió su varita de debajo de la almohada y comenzó a vestirse. Por la mañana no era persona hasta que tomaba el desayuno.

Joel: *Salió del baño completamente listo y al ver a Adrian levantado dijo:*
-¿Ya estás despierto? Vamos a desayunar entonces.

Adrian terminó de colocarse la corbata del uniforme y asintió. Se metió en los bolsillos algunos pergaminos por si los necesitase.
Ambos van al comedor.

Cuando llegó a la habitación, guardó el tarro de las arañas en su baúl.

Joel: *Tras guardar el huevo entre sus pijamas, Joel se dirigió a Adrian, el cual estaba sentado en la cama leyendo, y dijo:*
-Adivina de qué es el huevo.

- Sólo dime que no es de gallina, por favor.
Porque por tres arañas y media tortilla no merecía la pena haberse arriesgado así.

Joel: -Runespoor. Una serpiente de tres cabezas. ¿Qué te parece eso?

¿Había dicho...?
- Pero si son originarias de Burkina Faso, África. ¿Cómo lo habrá conseguido ese cabezahueca? Además... con como está el trafico de huevos para pociones...
Lo último lo dijo en voz algo más baja. Luego le miró.
- ¿Puedo cogerlo?

Itza toco a la puerta

Joel: -Claro, si te hace ilusión. Está en el cajón de mis pijamas.
*Al escuchar la puerta fue a abrir. Al ver a Itza dijo:*
-¿Buscas algo, guapa?

El cajón de los pijamas, como si se dedicase a ver qué tenía en cada cajón. Fue a la cómoda y comenzó a abrir y cerrar cajones hasta con dar el que buscaba. Bingo, allí estaba... Un potente ingrediente para pociones estimulantes de la agilidad mental de los más exotico. Con sumo cuidado lo tomó en sus manos. Dentro de él una pequeña y malvada criatura naranja brillante con rallas negras se preparaba para el momento de su eclosión. Y en sus manos estaba decidir si eso ocurriría o no.

Itza-Que me diran que han hayado en ese extraño huevo?-sonrrio

Joel: -Claro. Hay un runespoor listo para nacer. ¿Satisfecha?

Oh me dejaran verlo, tengo una aficion por las serpientes-sonrrio emocionada

Joel: -No veo por qué no, pero será cuando nazca. Aún no sé cuánto queda para eso.

Habría sido divertido ver como se retorcía en su agonía una criatura que ni siquiera había nacido pero por alguna razón, Adrian se apiadó de ella. Con sumo cuidado llevó el huevo hasta su cama y lo rodeó con sus sábanas para que permaneciera caliente. Después miró hacia Joel. ¿Tenía que pregonarlo todo a los cuatro vientos? En ocasiones podría ser algo más discreto.

una chica de andar sigiloso con una muñeca en la mano se acercó hasta la puerta situendose al lado de Itza - yo le doy un par de semanas como mucho... - dijo apoyandose en la puerta.

Itza-Hay un echizo para fortalecer no recuerdo como va-dijo pensativa cuando miro a aquella chica volteo-Disculpa? que haces aqui? -